domingo, 8 de enero de 2012

Un hombre a la sombra:

El hombre se halla a la sombra,
con cierta levedad, nota un rasgo de luz en su rostro.
Lo acapara la incertidumbre, el peor enemigo de la conciencia.
la infalible ausencia de la memoria o el retrogrado tiempo de un ser.
En manos su guitarra, fiel e incondicional compañera.
Las coincidencias no existen, solo presumimos de que hay casualidades,
pero hemos sigo cautivos de su deseo o su deceso, en el inconsciente.
Alguna vez fue catalogado como solemne, ahora desechado por ahi.
Todo los regalos pasan de moda, asi es tambien con las costumbres o las personas.
todo se torna de repente indiferente ante la fria mirada de un cavilador.
Ese arrogante calculador que roba hasta los huesos al mas pobre.
No existen mentiras, solo son verdades a escondidas, a hurtadillas que ahuecan aun mas el corazon.
Solo restan las imagenes, los paisajes, las batallas ganadas en campos ecuatoriales y en los semilleros del amor, se halla desnudo.
Hoy solo resta el recuerdo amable de saber que aquel hombre hubo sido un conquistador.

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